jueves, 25 de abril de 2013

Capitulo 8.


Entro por la puerta. Colgó las llaves. Saludo y fue directa a su cuarto. Se quito la chaqueta. Se acordó, no se la habia dado. La colgó detrás de la puerta. Cogió el teléfono fijo de su cuarto y llamo a Vale.
-¿Si?
+¿Vale?
-Dime.
+¿Has llamado a mi casa esta tarde?
-No. ¿Como ha ido?
-Bien, mañana hablamos.
+Vale, oye he pasado la tarde contigo comiendo chocolate.
-Si.
Colgó y salio al comedor. Se sentó en el sofá, su hermano jugaba a la consola. Su madre estaba en la cocina, haciendo la cena. No ceno. Se fue a dormir.

En el sofá tirado. Mirando algo que ver. Cuando vino, hizo los deberes. Le costo, no se acordaba mucho de eso de hacer los deberes.
+¿Quieres cenar?
-No mama, merendé tarde. Cena tu.
+No tengo hambre. Luego me haré un vaso de leche.
-Come, te estas quedando muy flaca.
+Eso te lo tengo que decir yo a ti.
-No puedes, mi cuerpo es perfecto.
+Cariño, hay que definir los papeles de esta relación.
-Si creo que si.
Se rieron. El se fue a dormir. Se puso el pijama. Tiro la ropa en el cesto. Se acordó de la chaqueta. Se rio. Mañana se tendría que poner otra. Llamo a su casa. Lo cogió la madre de ella.
-¿Esta Selene?
*Un momento, ¿de parte de quien?
-¿Me la puedes pasar, por favor?
*Si, claro.
+¿Si?
-Tienes algo que me pertenece.
Ella enseguida reconoció su voz. Su madre de ella, no.
+Pues le he cogido cariño, me parece que me la quedo.
-¿Y yo que? Es mi mujer.
+Pues me voy a poner celosa.
-No tienes por que, eres mejor que ella.
+¿Y como se llama?
-Eeeeh, Eustaquia.
+Bonito nombre.
-El tuyo es mas bonito.
+Normal, es mio.
-Tuya, me divorcio de ella. Te la regalo.
+Pues mañana me la pongo. ¿Sabes? Aun huele a ti.
-Pues sueña conmigo.
+Eso no depende de mi.
-Buenas noches.
+Hasta mañana.
Colgaron. El se fue a dormir. Ella también. Los dos durmieron. Pensando, el uno en el otro. De día. Su madre lo despertó. No renegó, como solía hacer de pequeño. Tan solo iba para verla. Lo llevo, espero en la puerta. Antes que ella llego Vale.
+Hey, hey. ¿Como fue?
-Muy bien, la lleve al 'Irish Chocolate'.
+Su lugar favorito.
-Como la primera vez.
Vio como bajaba del coche, llevaba su chaqueta. La que conducía era su madre, no su padre.
+Ahí viene. Yo voy arriba a copiar los deberes.
Selene se acerco a el.
+Hola.
-Hola. Te queda bien.
+Tu mujer me abriga.
-Me divorcie de ella. No siento lo mismo, ahora quiero a otra.
+Y seguro que no me dices a quien.
-Pues a una persona que es muy guapa, muy dulce y muy buena.
+Ah, debe ser perfecta.
-Para mi lo es. Me encanta.
Ella sonrió. El, también.
+Vamos a clase.
-Si.
Subieron, clases, clases y mas clases. Hasta que se hizo la hora de salir. Al salir, Ricki estaba en la puerta apoyado en su moto. Vale se fue. Selene, fue con Diego. El se lo pidió y ella no se negó.
-Ricki. Mira te presento, esta es Selene. Selene este es Ricki.
Se saludaron.
*He venido a por ti, para ir al taller. Necesito que le hagan la revisión a la moto.
-Vale pero no puedo llegar tarde, tengo que hacer los deberes.
*Que recuerdos, cuando yo venia.
La madre de Selene llego.
+Me voy ya esta aquí mi madre.
-¿Y tu padre?
+Se ha ido esta mañana de viaje de negocios. No vuelve hasta el domingo. Adiós.
Se despidió de ellos y subió al coche.
+¿Otra vez?
-Si, pero esta vez sera diferente. Todo ira mejor. Por que quiero darle lo mejor.
+Anda. ¿Te llevo a tu casa?
-Vale.
Los dos se subieron y desaparecieron entre el trafico de la ciudad.
Ella, aun no lo sabia. Sus sentimientos hacia Diego, volvía a nacer. Volvían a nacer, todas esas que cosas que no hace tanto hizo. Se volvía a enamorar de ese chico, tan diferente y tan igual a ella a la vez.

martes, 23 de abril de 2013

Capitulo 7.


Seis y media. Apoyado en la cabina. No necesitó pedirle la dirección a nadie. Ya se la sabia de memoria. Se asomo a la ventana. Lo vio, sonrió. Ella le hizo un gesto de que ya bajaba. Un minuto. Se puso unos vaqueros, unas manoletinas marrones, camiseta blanca y una torera clara. Se soltó el pelo. Estaba sola en casa, cogió unas llaves, probo que fueran de casa. Dejo una nota: 'Voy a dar una vuelta con una amiga. No vuelvo tarde. Besos, Selene.' Bajo, giro la equina y ahí seguía apoyado. Se reía.
+¿Que?
Cruzo la calle.
-¿Pero donde vas?
+¿Que pasa?
-No vas tu un poco fresca.
+¿Por que voy mal?
-No, mal no. Pero vas a pasar frio.
+No hace frio. Ademas, ¿no vamos a tomar un helado?
-No, he cambiado de opinión. El helado es demasiado bueno para la primera cita.
Comenzaron a caminar.
+Ah, ¿es una cita?
-Si paga el chico siempre es una cita. ¿O llevas dinero?
Ella negó, lo miraba y de vez en cuando miraba hacia delante.
-Entonces esto es una cita.
+Vale, ¿y donde vamos?
-A tomar chocolate con churros.
+¿Chocolate? Que bueno.
-Sabia que este gustaría.
+¿Y como lo sabias?
-Por que a las chicas os encanta el chocolate, ¿no?
Mintió, sabia que le encantaba el chocolate, y mas ese. Por que ahí ya la habia llevado mas de una vez.
+Si, me parece que me encanta.
-¿Te parece?
+No recuerdo si me gusta. Pero si nos gusta a todas, ¿por que a mi no?
-Pues este te va a encantar, es un chocolate Irlandés. El mejor.
Llegaron, en el escaparate ponía: 'Irish Chocolate'.
+¿Chocolate Irlandés?
-El mejor, esta muy bueno.
+¿Y churros?
-Si, la gente pidió y hacen. ¿Entramos?
Asintió, pasaron. Lo reconocieron enseguida. Los llevaron a una mesa. Alejada. Les dieron una carta. Ella miro. Señuelos. Eso le gusto mas que los churros.
*¿Saben ya que van a pedir?
-¿Tu que quieres?
+Chocolate y buñuelos.
-Dos de eso.
*En seguida.
El rio. Se acordó de las fiestas.
+¿De que ríes?
-Los buñuelos son típicos de las fallas. Las fiestas.
+Es cuando hacen muñecos y el día del padre los queman, ¿no?
-Si.
No tardaron en traerlos, comieron y rieron. Pagaron. Al salir, ella noto que si que hacia frio. Comenzaron a caminar, rumbo a su casa de ella. Ella cruzo los brazos.
-Te dije que ibas a pasar frio.
+Debí hacerte caso. Perdón.
Seguían caminando, un par de metros. No podía verla así. Pasaba frio. Hacia frio. Se quito su chaqueta. Se la dio. El llevaba camiseta.
-Pontela.
+¿Y tu que?
-Da igual. Llevo camiseta interior también. Y tu... te dije que ibas muy fresca.
Se puso la chaqueta, era una azul con rayas blancas. Una Adidas. Llegaron a la cabina. Le dio un beso en la mejilla y se fue. Vio como entraba al patio. Y se fue.

lunes, 22 de abril de 2013

Capitulo 6.


Clase de ingles. La profesora pide grupos de tres a cinco. Ni mas ni menos. Todas iban a por Diego, pero el se fue con Selene y Valentina.
-Chicas, ¿me puedo poner con vosotras?
Valentina le dijo que si prefería ir con las chicas de la clase. El negó con la cabeza un tanto asustado. Le acosaban con la mirada.
*Voy a por la cartulina. Ya vengo.
Valentina se alejo. Diego se sentó en el sitio de Valentina. Se le acerco Dakota. En la clase era como una capitana. Las dominaba a todas como marionetas. Menos a Valentina y a Selene. Ellas iban en su mundo siempre.
*Oye, eres el nuevo, ¿verdad?
-Si, soy Diego.
*Yo soy Dakota.
-Ah, bueno.
*¿No prefieres ponerte conmigo y mis amigas en el grupo?
-Es que no os conozco. Y la verdad.
*Bueno, así nos conoces.
Selene estaba dibujando encima de la mesa de Valentina su nombre. No levantaba la cabeza, pero se enteraba de todo.
-Es que de verdad, prefiero estar con ellas.
*¿De verdad? ¿No prefieres conocerme a mi?
+Dakota, ¿no ves que no quiere? No para de darte escusas para no ir.
Levantó la cabeza. Se fue, y vino Valentina. Se sonrieron. Ella lo miro, como intentando descifrar su cara, sabia que lo conocía de algo pero no sabia de que.
-Gracias.
+¿Que hay que hacer?
*Pues he hablado con la profe y podemos hacer un muñeco y escribir las partes del cuerpo o una redacción sobre donde se encuentra todo lo del cuerpo.
-Prefiero el dibujo.
+Y yo.
*Ya somos tres.
Se rieron. Valentina coloco la cartulina sobre su mesa y saco un lápiz.
*Ale, pinta.
+¿Como?
*Pintas genial. Mientras yo mareo a la profe para que me apruebe.
+Vale.
Mientras Selene intentaba averiguar como pintar y se decidía. Diego y ella hablaban.
+¿Te puedo hacer una pregunta?
-Ya la has echo.
Selene rio.
+Otra.
-Si, pero tu sonríe. Tienes una sonrisa preciosa.
+Gracias.
-Nada. Dime.
+Yo tengo mi cabeza en blanco, así que... Tu y yo, ¿no nos conocíamos de nada?
Diego pensó, no se lo podía decir. Por su bien. Quería que esta vez fuera diferente. Quería cambiar por ella.
-No, que yo sepa no. ¿Por que?
+Por que yo creo que si.
-Me viste en el hospital. Cuando me vendaron la mano.
+No. Tengo una sensación. Que me dice que te conocía de antes.
-Te estarás equivocando.
Termino el dibujo. No le había quedado mal. La verdad es que lo hacia bien.
+Ya esta, ¿no esta mal, no?
-No, lo haces bien.
Le apetecía quedar con ella. Una cita. Como antes. Pero esta vez de verdad. No a las carreras.
-Oye, ¿tienes planes para esta tarde?
Estaban pintando el dibujo. Paro y lo miro.
+La verdad es que no. No recuerdo nada. No puedo salir, me perdería.
-¿Parecería bien ir a tomar algo conmigo? Se de una heladería buenísima.
+Vale. ¿Pero vendrías a por mi a mi casa?
-¿A tu casa?
+Si, es que si salgo sola me pierdo.
-¿Y si quedamos en algún punto que veas desde tu casa?
+Desde la ventana de mi habitación veo una cabina telefónica.
-Pues ahí a las seis y media. Dame tu dirección.
Ella le dijo que se la pidiera a Valentina, que no la sabia.

domingo, 21 de abril de 2013

Capitulo 5.


El día paso, sin novedades. Martes, de día. Los primeros rayos de la mañana entraron la habitación. Selene giró la cabeza, le molestaba. Hacia un día precioso. Se levanto. Se puso el uniforme, hizo la cama. Y se soltó el pelo. Se lo echo hacia atrás y hacia el lado. Justo como a Diego le gustaba, solo que ella no lo sabia. Se pinto, poco maquillaje la raya bien echa y rimel. Su madre entro en la habitación.
-¿Vamos?
+Si.

En otra parte, sentado en la mesa de la cocina, se bebía apresuradamente el ultimo trago.
-¡Mama!
+Dime.
-Venga no quiero llegar tarde.
+Ya estoy, déjame beber...
-No vamos. Es mi primer día. Ahora te tomas uno en la cafetería.
Cogió con un brazo a su madre y con el otro la mochila del sofá. Mientras su madre cogió el bolso y el maletín como pudo.

Mismo colegio. Misma entrada. No se vieron. Ella llego antes que el. El cinco minutos después. Clase. Grupos. Chicos en un lado. Pequeños grupos de chicas en otros. Selene y Valen hablan de sus cosas. Entro por la puerta. Todas las miradas se dirigían habia el. Como no, diferente a todos los demás. Todas las chicas no tardaron en ir a el, pero la primera en saludarlo fue Valentina. Quien cogió a su amiga, y la arrastro tras de ella.
*Hola Diego.
-Hola Valen.
Todas las demás se sorprendieron al ver que Valentina conocía a ese extraño, pero a la vez atractivo, chico.
*Te presento a Selene.
Valentina se hizo a un lado. Selene apareció tras de Valentina.
El, con una enorme sonrisa en la boca se mostró ante los ojos de Selene. Ella se acordó de el. Bajo la mirada, vio la venda. El chico del hospital. Valentina se retiro, con la escusa de copiar los deberes. Ella aun seguía con la cabeza gacha. Valentina se giro, el le guiño un ojo.
-Soy Diego, ¿tú?
Le levanto la cabeza, aun seguía pensando en lo del hospital. Le miro con esos ojos verdes. Ella, con esa mirada de inocencia. Una sonrisa.
+Soy Selene.
-Bueno, veo que estas bien. Sonríes.
+¿Como?
-Que pensaba que te sentías mal, no levantabas la cabeza ni hablabas.
+Ah, bueno. Pensaba.
-¿En...? Si se puede saber.
+En que te conozco.
-¿Ah si?
+Si, te vi en el hospital. Mientras te vendaban la mano. Solo que cuando te vi, no ibas así. Ibas mejor con los vaqueros.
-A mi tampoco me gustan, pero si quiero estudiar. No recuerdo haberte visto.
+Yo tampoco, se muchas cosas de mi.
-¿Que te ha pasado?
+Si te interesa, en el patio te cuento. Ahora, mejor sentaros.
La profesora entro. Todos se sentaron. Valentina, ya habia copiado los ejercicios. Incluso le habia dado tiempo a escribir una nota: 'Como te mira Diego ^^'. Levanto la mirada, miro a su amiga. Ella le contesto con una sonrisa. Dos horas de clases. Patio, Selene camina con su amiga. Se sientan en unas gradas.
+¿Quien es?
-¿Diego?
Selene asiente. Mira como juegan al fútbol. Incluso Diego, el fútbol une a todos los hombre, piensa Selene.
-Es un amigo. Ya lo conozco, casi cinco meses. Desde que el verano empezó. Te mira bien, tan bien que viene a ti.
Se fue. Los dejó solos. Se sentó a su lado.
-¿Me cuentas?
+No hay mucho que contar. No me acuerdo de nada. Lo ultimo que recuerdo de mi es que, desperté en la cama del hospital. Fui al pasillo, te vi. Me llevaron a la habitación. Y poco mas.
-Bonito resumen de tu vida.
Ella no pudo evitar reír. El la miro con otra sonrisa. Siguieron hablando. Todas las demás la miraban con rabia, excepto su mejor amiga, que a pesar de todo, sonreía por ver como no todo se habia perdido.

miércoles, 17 de abril de 2013

Capitulo 4.


Lunes. Por la mañana. Muy temprano. Diego no esta acostumbrado a madrugar. Pero si quería hacerlo, debía madrugar. Entro a la habitación de su madre con una bandeja en la mano. La puso sobre la mesita.
-Mama, mama.
Su madre, entreabrió los ojos.
+¿Que?
-Toma, el desayuno.
Miro el desayuno y el reloj.
+Apenas son las siete de la mañana. No que no ibas a salir.
-Y no salí. Me acabo de levantar.
+Coge no mas de cien de euros.
-No quiero dinero, pero ahora cojo.
Su madre se rio.
+Vale, coge cincuenta. ¿Y que quieres?
-Que me apuntes a la escuela otra vez.
La madre se incorporo. Le tomo la temperatura, no tenia.
-¿Que haces?
+Fiebre no tienes.
-Estoy bien.
+¿Entonces?
-Quiero que me apuntes al Fernando III. Es un colegio privado. Pero es uno de los mejores.
La madre cogió la bandeja y empezó a comer una de las tostadas con mermelada.
+¿Y como es eso de que ahora quieres estudiar? Con todos los problemas que me diste para que te sacara.
-Por que a ese colegio va Selene. Su padre no me deja acercarme a ella. Pero como iré a su escuela, el no lo sabrá.
+Ah, ya decía yo.
-Bueno, yo ya me e buscado la vida para conseguir un uniforme.
+¿Que has echo?
Diego rio. Recordaba como ese mismo día a las cinco de la mañana iba con su mejor amigo, Ricki, a casa de uno que iba a esa escuela. Mientras Ricki le robaba de la cartera los setenta euros que llevaba, Diego busca el uniforme. Recuerda como lo metió en una bolsa y lo dejo caer desde el segundo. Como salto.
-Nada mama, desayuna. Tienes media hora.
+Aquí la madre soy yo.
-Ay, que te quiero yo.
Le dio un beso en la mejilla.
+¿Y los libros?
Eso se le olvido.
-No lo pude conseguir.

En otro lugar, sonó el despertador a las ocho de la mañana. Una mano inocente apago el despertador. Salio de la cama, abrió el armario y coloco perfectamente el uniforme sobre la cama.
Se quito el pijama y se puso el uniforme. Se peino. Se puso un poco de maquillaje de base y se hizo la raya del ojo.
Miro la hora, las ocho y cuarto.

Diego estaba desayunando. Su madre entro a la cocina con la bandeja. Mojo un poco lo que habia en el interior y lo puso en el lavavajillas.
-¿Ya estas?
+Si, ¿has echo tu cama?
-Si, hace rato.
Su madre se sorprendió, su hijo hacia cosas que hacia años que no hacia.
-¿Vamos?
+Claro.
Cogieron el coche y se dirigieron al Fernando III. Una vez allí, se dirigieron a la dirección. Cuantas veces antes, se habia colado sin que lo vieran hasta el patio. Solamente, para darle un beso.
Para pasar un rato con ella. En la dirección estaba la directora. Rosana. Entraron. Se sentaron.
+Buenos días.
-Buenas.
*Hola. Bueno, ustedes dirán.
+Mi hijo, quiere apuntarse a este colegio.
*Nombre y apellidos.
-Diego Garrido
*Muy bien.
La directora busco en el ordenador su expediente. Cuando apareció en la pantalla, se sorprendió mucho. No podía aceptar a un alumno así. La de cosas que habia echo para que lo expulsaran.
+¿Algún problema?
*Si, no puedo aceptar a su hijo. Tiene un expediente un tanto...
-Directora.
*Dime.
Diego se incorporo. Se sentó correctamente.
-Mire, se que no soy el mejor de los alumnos. También que mi expediente debe ser uno de los peores que habrá visto.
*Si.
-Pero, le prometo, que aquí voy a cambiar. Todo eso, lo hice porque no quería.. estar ahí, en ese instituto. Le prometo, que seré un alumno bueno.
*No se, ¿que pensaran los padres?
-Hagamos un pacto, a la mínima que haga me tira. Para siempre. La mínima. Por favor, acépteme.
Marta, la madre de Diego no sabia si ese realmente era su hijo. No se acordaba de la ultima vez que habia escuchado de la boca de su hijo un 'por favor'. Sin embargo, el si que sabia cuando fue la ultima vez. No hace mucho, a Selene. Cuando le pidió que se quedara media hora mas con el.
*Esta bien, la mínima.
-Gracias.
+¿Y cuando podría empezar.
*Pues el trimestre ya esta empezado.
-¿Y no puedo empezar antes? Me pondré al día.
*¿Y el uniforme y los libros?
-El uniforme ya lo tengo.
+Los libros los compraríamos en una librería.
*No hará falta.
La directora se levanto, rodeo la mesa y abrió un armario que habia a mano izquierda. De ahí saco unos libros de cuarto de secundaria.
*Tomad, solo tenéis que comprar material. Libretas, bolígrafos...
+Y esto cuanto es.
*Nada, son vuestros.
-Gracias.
*Necesito la documentación. El papeleo y eso.
-Yo me puedo ir. Así voy a comprar a la papelería todo el material.
*Yo de ti no necesito nada. Solo de tu madre.
+Toma dinero.
Su madre le dio setenta euros. Diego salio y dejo que hicieran las cosas. Antes de salir, espero a que todas entraran. Vio como Selene iba con Valentina. Iban a subir Valentina lo vio, el le hizo un gesto de que viniera. Ella fue.
+¿Que haces aquí? Como te vea su padre, te matara.
-¿Como esta?
+Sin memoria. No se acuerda de nada.
-Ya, lo se. Tengo que pedirte un favor.
+¿Tu? ¿El que decía que nunca pediría nada?
-Por favor.
+Solo por que lo pides bien.
-Mañana empiezo aquí. A estudiar.
+¿Tú? ¿Como te han cogido?
-Haciendo un pacto. Mañana, no digas quien soy. Quiero estar cerca de ella sin que sepa que soy yo.
+Esta bien. ¿Te conozco o no?
-Si. Pero ella no.
+Bien. Me voy.
-Gracias. Bueno, he de comprar material.
+Y yo tengo que llegar a clase.
Se separaron. Cada uno por su lado. Ella subió y el se fue. Compró una mochila, estuche, libretas y bolígrafos. Luego fue al coche, su madre estaba dentro.
-¿Ya esta?
+Si, empiezas mañana. ¿Estas seguro? No quiero mas problemas.
-Si, quiero.. estar cerca de ella. Junto a ella, empezar de cero.
+Bien. ¿Vamos a casa?
Diego asintió. Se miro la mano. Aun la tenia vendada. Ellos fueron a casa. El día paso, sin novedades.

Capitulo 3.


Mientras Diego y su madre hacían la compra Selene y su madre habían llevado su ordenador a arreglar. Pero todos los datos se tenían que borrar. De nuevo otra vez en su casa.
+Una cosa.
-Dime hija.
+Hasta que vuelva a llamarte 'mama', ¿como te llamo?
-Pues a mi, Helen.
+¿Y a tu marido?
-A tu padre, José.
+¿Y a tu otro hijo?
-Ryan
+José, Helen y Ryan.
-Si.
+Gracias por apañar el portátil.
Cuando volvieron a su casa, su padre estaba reunido con el hermano y la mejor amiga de Selene, Dayana. Lo que ella no se imaginaba es que lo que su padre estaba hablando con ellos era que no debían decirle nada a Selene. Nada del accidente. No podían decir nada relacionado con Diego. Debían decir que se cayo en la ducha y no en una carrera ilegal.
-Selene.
+Hola.
Su mejor amiga se abalanzo sobre ella. No la dejo respirar.
+¿Quien eres?
-Tu mejor amiga. Valentina, pero tu me decías Vale. Tenemos que hablar.
*¿De mi tampoco te acuerdas? Soy tu hermano, Ryan.
+Lo siento.
·Anda hijo, ve y ayuda a tu madre.
~Si, ven ayúdame. Oye, compra pan.
El padre fue a comprar pan. Ellas se fueron a la habitación, con poco de hablar Selene, se dio cuenta de que realmente si que era su mejor amiga. Esa amiga loca, que tanto quería.

En otra parte, Diego cenaba pizza con su madre. Sin saber aun, como contarle lo que paso con Selene a su madre.
+Diego, ¿que era eso que me querías contar?
-Lo que le paso a Selene.
+¿Que le paso?
-Un accidente conmigo.
+¿Que?
-La semana pasada. Se monto conmigo en la moto. No se agarro bien a mi, y se cayo hacia detrás en un caballito.
Su madre no encontró palabras.
+¿Como esta?
-Hoy a salido del hospital. Yo la vi bien. Intente entrar hoy, pero su padre me tiro. De la rabia de no poder entrar, le pegue a un extintor.
+Por eso la mano vendada.
-Si.
+Pero tu no la obligaste a subir.
-Pero lo pude haber evitado. Yo no quise hacer ese día la carrera, pero me pico. Y ya sabes como soy.
+No eres el culpable.
-Lo se.
+Anda, come. ¿Hoy vas a salir?
-No me apetece. ¿Haces palomitas y vemos una película?
+Bien.
Esos fueron sus planes.

Selene y su mejor amiga platicaban. Cosas que habían pasado. Una vez en la mesa. Cenaron, después Valentina se fue. Antes de dormir como era costumbre, su madre de Selene entro a hablar con ella.
+Una cosa, Helen.
-¿Si?
+Valentina me ha preguntado si el lunes vuelvo a la escuela.
-¿Y que le has dicho?
+Que no sabia. También he visto el uniforme. Debe ser un colegio privado.
+Si. Si quieres el lunes puedes volver. No hay nada que no te impida ir.
+Vale. Buenas noches.
Le dio un inesperado beso en la mejilla. A su madre le gusto.
-Buenas noches.

martes, 16 de abril de 2013

Capitulo 2.


Una vez en su casa, Selene saludo a su hermano y su padre, aun sin saber quien era quien. Entro en su habitación. La observo. Abrió el armario, miro su ropa. Abrió el primer cajón que había en el armario. Vio un uniforme de escuela. Lo cerro. Abrió el siguiente. Camisetas. Lo cerro. Y abrió el ultimo, pantalones cortos y camisetas de verano. Hacia frió  Se sentó en un escritorio que había  Abrió el primer cajón, cogió una agenda de escuela. La abrió por el ultimo día que había escrito. El 29 de octubre. Viernes. Al final de ese día había escrito: 'mañana' y al lado un pequeño corazón. Dejo la agenda encima del escritorio. Abrió el ordenador. Lo encendió, pero no pudo acceder. Tenia clave. Lo cerro. Se asomo a la ventana. Una ventana en la muchas veces antes, había estado asomada esperando. Una ventana llena de muchos secretos. Secretos, de los cuales ella no se acuerda. Historias que tendrá que volver a vivir. Se aparto de la ventana y fue a el comedor.

A los pies de esa ventana. Sin que ella pudiera verlo, el la observaba. La veía, como muchas veces antes la había estado esperando ahí. A que ella bajara e irse a mil por hora. Irse muy lejos. Lejos. Muchas veces. El, que solo quería divertirse. Y demostrarle a ella que no se enamoraría. Pero finalmente, cayo. Poco a poco y sin darse cuenta, se enamoro. Termino locamente enamorado de esa, 'niñita loca' como el le decía. Se fue de ahí, como muchas otras veces. Pero esta vez no llevaba a nadie detrás. Iba solo. Llego a su casa. Su madre estaba sentada en su despacho. La saludo de dio un beso, y se fue a su habitación. Había pasado una semana, una semana que para el se había sido como una eternidad. Se tumbo en la cama. Cama en la cual, algunos días habían estado el y Selene tumbados viendo alguna película.
+Diego, Diego.
-Si, mama.
Se incorporo.
+¿Hoy no sales?
-No mama.
+Bueno, yo voy a hacer la compra.
La madre se dio media vuelta, pero se volvió a girar.
+¿Quieres que te...?
-¿Te puedo acompañar?
+Si, claro.
La madre se sorprendió. Nunca antes su hijo le había dicho si la podía acompañar a... nada.
En el coche, su madre y Diego.
+Diego, ¿como esta esa muchacha? ¿Selene?
-Si.
+Hace días que no la veo.
-Esta bien, hoy la he visto. Mama, cuando volvamos a casa. ¿Podemos hablar?
+Si claro.
Diego cerro los ojos. Se acordó de cuando fue a el hospital. El padre de Selene no la dejo casi pisar el hospital.
+No, muchacho.
-¿Que? Déjeme pasar. Quiero verla.
+No, ya se puede olvidar de mi hija. No quiero volver a verle cerca de mi hija. Por tu culpa, ella esta en esa cama. En coma. Sin saber cuando despertará, si es que despertara.
Diego salió del hospital. Ese día no pudo verla. Pero dos días después, sabiendo que su padre no iba a estar en el hospital.
Entro a la habitación 315. Estaba su madre. Se dio media vuelta.
+No, no te vayas. Pasa, si lo que quieres es verla.
Se giro, y cerro la puerta. Dio un par de pasos y se acercó a su madre. Su madre se levanto.
-Gracias, ¿como esta?
+No lo se. Solo sabemos que esta ahí, que duerme.
-Gracias por no tirarme, como hizo su marido.
+De nada. Yo no te culpo. Se que si mi hija, se subió a esa moto contigo en la carrera, fue por que ella quiso. No por que tu la obligaste.
-Nunca la obligue a nada que ella no quiso.
+Lo se. Ella me lo contó todo.
-No puedo estar aquí. Tu marido me prohibió que me acercara a su hija. Lo único que quiero ahora es que este bien. Me da igual si me tengo que ir lejos o quedarme.
A la madre de ella la llamaron.
+Mi marido va a venir.
-Le puedo pedir un favor.
+Si, claro.
-Si pasa algo avíseme. Por favor.
+Por supuesto.
Diego le dio un beso en la frente a Selene y volvió otra vez a la realidad.
+¿Que te pasa?
-Nada.
Aparcaron, la compra fue en silencio. No hablaron mucho, apenas alguna palabra de que comprar. Otra vez en su casa. Su madre guardo la compra, el se sentó en el sofá.
+¿Que te pasa?
-Nada.
+¿Vamos a cenar a algún lado, o aquí?
-Prefiero aquí, porque quiero que hablemos.
+Esta bien, ¿pedimos una pizza?
-Bien.

Capitulo 1.


Despertó en la cama del hospital. Selene era una adolescente de 16 años.
Salio de la habitación, iba buscando algo que le recordara quien era, de donde venia.
Mientras iba por los pasillos vio a un chico a lo lejos. Se sintió increíblemente atraída hacia el.
Una enfermera le estaba vendando la mano. Alguna pelea pensó ella. Tenia malas pintas.
Una enfermera se le acerco. Le toco el brazo.
-Perdone señorita, ¿se encuentra bien?
+Si, ¿usted sabe quien soy?
La enfermera le agarró una muñeca, miro la pulsera que la chica tenia en la muñeca.
-Si, tu eres Selene Martínez. Perteneces a la habitación 315. Ven, te acompaño. No deberías estar aquí.
La chica se giro por ultima vez para mirar a ese chico tan extraño que le resultaba familiar, pero el chico ya no estaba.
Llegaron a la puerta de la habitación. Selene paso a la habitación. Una mujer estaba discutiendo a los pies de su cama con un doctor. Nada mas entrar esa mujer abrazó corriendo a Selene. Ella se asusto y se aparto de la mujer. El doctor salio de la habitación.
-¿Que te pasa cariño?
+¿Co..como que cariño? ¿Qui...quien es usted?
-Soy yo, soy tu madre.
+No, usted no es mi madre. Y sera mejor que se vaya, por favor. No se quien es usted y me estoy asustando. Así que mejor que se vaya.
Selene se sentó en la cama. La mujer salio y busco al doctor de la niña. No tardo en volver a entrar a la habitación junto con el doctor.
-Señorita, soy el doctor Cisneros. ¿Como te encuentras?
+Me duele un poco la cabeza.
-Bueno eso es normal, te llevaste un buen golpe en la cabeza.
+Doctor, ¿también es normal que no me acuerde de nada?
-Si, también. ¿Me deja mirarle como va esa herida?
+Si, claro.
Selene agacho la cabeza. El doctor le puso sus hermosos cabellos sobre su también bonita cara. No veía nada.
+Doctor, ¿que es lo que me paso?
La madre de Selene, antes de que el doctor hablara, se adelanto.
*Te caíste en la ducha.
-Ya te puedes poner bien.
+¿Quien es?
-Esta mujer es tu madre.
+No me acuerdo.
-Bueno, ¿sabes como te llamas?
+Una enfermera me dijo que Selene.
-Muy bien. Señora, acompáñeme.
La madre de Selene y el doctor Cisneros salieron de la habitación a el pasillo.
-Señora, su hija sufre amnesia.
+Y, ¿la volverá a recuperar?
-Eso depende de su cabeza.
+¿Puedo llevarla conmigo ya a casa?
-Si, claro. Iré preparando el alta.
La madre volvió a entrar en la habitación.
-Bueno, ¿vamos a casa?
+Quiero ser franca contigo. No se quien eres.
-Soy tu madre.
+Eso es lo que decís, pero... no es lo que siento.
-Ya..
+Pero lo intentare.
-¿Vamos?
+Si, claro.
-Mira, mientras yo firmo los papeles en ese armario de ahí hay ropa tuya. Vístete.
Su madre salio de la habitación. Ella se quedo sola, pensando. Abrió el armario. Vio que habían un par de pantalones, una camiseta, un par de botas y un abrigo. Se vistió. Y salio junto con su madre. Su madre le iba hablando de su casa, sus cosas...
Subió a un auto y puso rumbo a su casa.

En el mismo hospital, en la misma puerta. El mismo chico que Selene había visto, estaba sentado en su moto. Miraba como Selene salia junto con su madre. Diego mientras fumaba un cigarro. Termino su cigarro, lo apago y se fue.

Introducción.


Selene estaba enamorada, enamorada de un chico que no le
convenía. Justo lo contrario a lo que ella era. Pero el amor hacia que hiciera cosas que ella nunca antes había echo. A el lado de Diego, ella era un espíritu libre. Un accidente fatal pondrá en peligro todo eso que habían construido. Todo se borrara como si nada. Y todo tendrá que volver a nacer. El amor entre ellos será... Imposible Olvidar.